Las máquinas de cambio son terminales de pago sin personal que cambian dinero en fichas para usar in situ.
Aceptar pagos en una central y el cambio a fichas reduce la inversión de seguridad necesaria para dinero en efectivo. Facilita la aceptación de diferentes métodos de pago y el ajuste de los precios. Además, los clientes son más propensos a volver cuando todavía disponen de algunas de sus fichas.
Las ubicaciones normales para instalar máquinas de cambio son salones recreativos, lavaderos de coches, lavanderías, tiendas de 24 horas. A menudo las fichas representan un valor monetario, por lo que se recomienda una ficha personalizada en vez de una ficha estándar genérica. Esto aumenta la fidelización del cliente y reduce el riesgo de recibir fichas de otras empresas.
Las fichas más populares para las máquinas de cambio son: